nuestros bonitos jardines

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mercredi 30 décembre 2015

La rareza del brócoli y las propiedades de las piedras


Nota : Este artículo se comenzó a escribir en francés en el otoño del 2012. Tuvimos tiempo de traducirlo solamente en Deciembre del 2015, con la ayuda de nuestra profesora de español, Carmen Luz. 
¡ Buena lectura ! 

Retrato otoñal del jardín a final de estación.
Cosmos emergen de los huecos de los nidos de mis abejas.

Hélène :
El otoño inspira el alma poética del jardinero, pero hoy, es un descubrimiento 
muy interesante que me mueve a escribir : se trata de los brócolis y de sus rarezas.
Todo el mundo conoce bien esta verdura y después de las espinacas de Popeye, fué la segunda verdura más recurrente en mi plato durante mi infancia.
¿ Ustedes la han ensayado en su jardín ?

Pueden ver aquí, el sitio donde
la primera cabeza fué cortada.
Pueden ver también otras inflorescencias. 
Este año fué mi primera experiencia y tengo una bella revelación que posiblemente, podrían ensayar en los próximos años : ¡ Esta verdura es una hydra ! Si, si. Cuando cortamos la primera cabeza otras más pequeñas van a aparecer durante las semanas siguientes. 
Yo casi perdí la oportunidad porque yo pensé que sería mejor cortar la planta entera.
Felizmente, debido a mi pereza y a un viaje de dos semanas, la tarea no fué hecha. Lo que dió como resultado que cuando regresé, habian nuevas cabezas de brócoli a través de viñas de pepinos amarilleando.

¿ Pepinos ? Si. Yo planté pepinos entre los brócolis. Se elevaron a través de las hojas verde-azúl hasta barillas de bambú plantadas aquí y allá. Entonces, las dos plantas funcionan bien juntas.

El brócoli no es una verdura fácil a cultivar. Louise no tuvo suerte este año : sus plantas produjeron solo hojas. Afortunadamente, las hojas son deliciosas, entonces se las comió. Por mi parte, intenté una pequeña experiencia que, tal vez, es parcialmente responsable de la vitalidad de mis tres plantas.  
Primero, las sembré al interior. Sin embargo, en un pequeño bote, crecieron dos plantas vigorosas. Me dolió la idea de destruir una de las dos. Pero, cuando fué necesario transplantarlas, me di cuenta que estaban demasiado próximas. La solución provino de Ray Browning ( Canal You Tube : Praxxus 55712)

Aprovecho la ocasión para describir su método original con pocas frases : el se dio cuenta que cuando dos o tres semillas germinan en el mismo macetero, no es necesario sacrificar las plantas que estan en exceso. Ray transplanta sus plantas jóvenes de tomates, dos o tres juntas, varias veces, en un macetero cada vez más grande y profundo. Se inclinan los tallos de cada planta para apartarlas y para las mantener en posición, agrega mantillo hasta pocos centimetros abajo de su extremo (corta las hojas en la parte del tallo que esta enterrado, deja solamente las pocas hojas de la punta de cada planta). A medida que las plantas crecen, agrega mantillo de nuevo y gradualmente, el macetero se llena completamente. Cada vez, el utilizará un macetero más grande. 
Noten que su objetivo es estimular la formación de numerosas  raíces vigorosas. Después, cada planta producirá tallos y hojas en buena cantidad y podrá sostenerse con más facilidad.





 ¿ Si Ray puede apartar plantas jóvenes de tomates, yo podría hacer lo mismo con plantas de brócoli, seguramente ? Entonces, yo utilicé su método al momento de transplantar mis plantas en el jardín. Se inclinan los tallos de cada planta para apartarlas y para mantenerlas en posición, agregué mantillo y llevé una piedra redonda en el centro.

Esta piedra ayuda a las plantas a apartarse, pero ofrece un otro beneficio, según mi hipótesis (esta única prueba no es suficiente para probar nada). 
Es conocido en jardinería que podemos utilizar la masa térmica de un objeto (rocas, gravas, cemento o agua, por ejemplo) para acumular calor durante el día y liberarlo durante la noche siguiente. Resulta de ese fenómeno una temperatura más estable.
Por seguro, el brocoli prefiere el fresco. Pero, tengo la impresión de que, para cualquier planta, la températura lo más constante posible es mejor que las variaciones de este verano.

Por cierto, podemos utilizar más el principio de masa térmica. Por ejemplo, plantar tomates próximos a un patio de cemento o a varias rocas puede dar más calor y extender la estación de los tomates hasta el fin del verano. Aquí, en Quebec, la proximidad de los cimientos de la casa da el mismo efecto. De esa manera, algunas plantas más frágiles pueden sobrevivir a nuestros inviernos dificiles. Sepp Holzer, que vive en Austria, utiliza este principio para cultivar plantas que normalmente no son resistentes al frío riguroso de su región. Sepp las planta al lado de grandes rocas en terreno montañoso, frente al sol.

Al final, esta experimentac
ión me abrió los ojos sobre la variedad de métodos que estan a nuestra disposición en el jardín. Entonces, puedo agradecer a mis plantas de brocoli que me permitieron reflexionar el papel de las piedras en el jardín. Tal vez su propiedad de acumular calor no estuvo utilizada al maximum de su potencial, dado que los brocolis no son muy friolentos. Pero fué mi primera lección práctica sobre la tecnología térmica¡ Que afortunada ! Por cierto, voy a aplicar este aprendizaje en el futuro.